miércoles, 10 de enero de 2007

Pacto entre Caballeros - Joaquín Sabina


Sin apenas tiempo para pasarme por este rincón en el que me refugio para escribir, aquí estoy de nuevo. Cansado y rodeado de libros...Pero con la cabeza bien alta, como siempre. Esta canción suena hoy porque alguien me pidió hace tiempo que "pinchara" una de Sabina...y yo, yo nunca encontraba el momento para dedicarle unas líneas a una de sus letras. Resulta complicado hablar del que para mí es uno de los mejores compositores sin parecer un ignorante, pero lo intentaré. Soy muy de escuchar...puedo no decir nada durante tiempo limitándome a atender a la persona que me habla con tal de aprender lo máximo posible, pero he de reconocer que siempre doy mi opinión, buena o mala, mejor o peor...tenga razón o no, no me puedo estar callado. A lo que voy, (que ya me he puesto en modo koala y empiezo a irme por las ramas...). Es increíble lo que a una persona puede llegar a ocurrirle fruto de la casualidad del espacio y del tiempo. Es como cuando llevas años sin ver a alguien, basta que pienses en esa persona para que aparezca en el momento menos esperado...por lo menos eso dicen. Yo creo que realmente nos podemos llegar a cruzar mil veces en un día con alguien a quien conocemos y ni si quiera darnos cuenta, pero es cuando pensamos en ella cuando deja de ser invisible para nosotros y se convierte en una realidad. Sea lo que sea el otro día me choqué con un hombre mayor de camino a clase. Estábamos entrando en el vagón y nos pedimos perdón. Era uno de estos hombre arrugados como recién salido de la bañera pasados 3 días, uno de esos viejos verdes que tiene un diario lleno de historias que contar, que gracias a su insistencia por darlas a conocer nunca caerán en el olvido. Tú a su lado te sientes diminuto inmerso en un mar de dudas e ignorancia vestida de domingo. No le faltaba el periódico bajo el brazo ni las clásicas bolsas que se forman en los ojos a cierta edad, era un anciano ORIGINAL, de los buenos (made in 1920). Al chocar le dije "Esto es la jungla"...a lo cual me respondió "...Y lo peor de todo es que es una jungla de humanos.". No tenéis ni idea el eco que tuvo esa frase en mi cabeza durante todo el día...Nuestra amistad, tan efímera como una flor sin el agua de su florero, duró exactamente lo que dura el trayecto entre dos estaciones del metro de Madrid...que como todos sabéis, VUELA.

Cierra los ojos y piensa bien bien fuerte en quién te gustaría que mañana te tapara los ojos con las manos por la espalda sin tu darte cuenta. Cruza los dedos. Ahora vuelve a abrir los ojos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

soy una privilegiada estos dias
y me se tus historias antes de q las escribas
aunque he de decir q escritas son la leche
tienes un "nosequé" al escribir.

hoy no te he visto ni ná
espero q no te hayas maltratado muxo el cerebro
ya sabes q se cansa hay q cuidarlo y tol.

mañana yo examen (como los indios)
jooder, a ver q tal
socorroooooooooooooo

un besit lu

Barbara dijo...

Wali weendo gro figliberas cri, keorichi divero flo kagorzao! Vitordacoa il jamakriz, resterealt masprepian. Wiejando zio espone, hissista lode.

Unknown dijo...

Un momento mágico de conexión intergeneracional. Mola!

Anónimo dijo...

"Quevedo con maneras de Bob Dylan,
amigo inseparable de la luna,
de acordes y de versos tu fortuna,
casta y figura digan lo que digan".

Es parte de la canción dedicada a Sabina. La primera frase me recuerda a ti, sabes escribir sin perder tu "toque" rockero.
Gracias por acordarte.
pd: No conocía esa canción, pero ahora no puedo dejar de escucharla...
Beso