domingo, 25 de marzo de 2007

I wish you where here - Incubus


Dicen que uno más piensa cuando se tienen ciertas necesidades fisiológicas y decidimos hacerle una visita al señor Roca. En mi caso eso no pasa, puesto que soy de veloz expulsión (por llamarlo de alguna manera). Pienso cuando estoy solo y en modo stand-by. Me gusta caminar de noche volviendo a casa. Solo, pero a la vez rodeado de gente. Me gusta tumbarme en mi cama a oscuras y escuchar a Puccini, cerrar los ojos pero nunca llegar a dormirme; no puedo hacerlo si de fondo suena una canción que conozco. Me gusta llegar a la playa y tumbarme al sol con la única melodía de las olas rompiendo a mis pies. Buscar mi hueco entre la arena y jugar con ella mientras se escurre entre mis manos como si del tiempo se tratara...por mucho que lo intentes siempre termina escurriéndose por entre los dedos al cerrar tu puño. Después de media hora me levanto y siento ese pequeño viaje que te da al cerebro avisándote de que llevas demasiado tiempo expuesto al sol. Titubeante y poco decidido, con miedo a lo que voy a encontrar, me acerco a la orilla para dibujar con los pies figuras sin ningún tipo de sentido sobre su contorno, marcado por la figura moribunda de las olas cuando éstas pierden toda su fuerza. Sorprende que siempre acabo escribiendo algo. Me adentro unos centímetros y me mantengo inmóvil, cierro los ojos. Pronto el mar me hace suyo y entierra mis pies haciéndoles formar parte de lo que él considera que le pertenece...egoísta. A medida que pasan los minutos me dejo llevar...y, sin darme cuenta ,me encuentro en medio del Mediterráneo formando algo parecido a una isla en medio de la nada.

Isla de Luis le llamaré, ¿por qué no?

El mar es un buen sitio para tumbarse boca arriba sentir el movimiento balsámico del agua a tus espaldas, volver a cerrar los ojos y vuelta a empezar...A veces estar solo te da estos pequeños placeres. Ya echo de menos la playa.

5 comentarios:

Unknown dijo...

Solo tu eres capáz de empezar escribiendo del señor roca y acabar en el mediterraneo.

Mike dijo...

Guago!

En la playa estás en muy poco... Tienes ganas eeeh, ya te veo yo a ti...

Anónimo dijo...

La sensación que tienes tú cuando te tumbas en la arena y sientes el mar en tus pies debe ser muy parecida a la que siento yo cuando miro el Cantábrico desde lo alto de un acantilado,rodeada de montañas llenas de eucaliptos, mientras la brisa marina enreda mi pelo y las bocinas de los barcos que entran en el puerto me avisan de que ya va siendo hora de ir a cenar...ay! yo también tengo ganas de escapar de aqui por unos días. ¡y ya no me queda nada!

Anónimo dijo...

he decidido obviar tu comentario escatológico..jiji

Bárbara A. dijo...

que puedo decir
que me gusta que a veces me invites a tus rincones imaginarios e inventemos sitios y risas que solo se dan con la mierda de Lu y sus amigas galletoides, con Clark y Lois Lane su novia, y con la mona Chita ya que estamos.

Ahora en serio
me falta tumbarme realmente en la playa contigo y hablar y contar constelaciones un rato
a ver para cuando superman.

Un besazo